La hemorragia del tubo digestivo es la pérdida de sangre proveniente de cualquier parte del tubo digestivo, ya sea esófago, estómago, intestino, colon o recto. Pueden dividirse en hemorragias alta y bajas. Las altas provienen desde la cavidad oral, hasta el duodeno y las bajas de todo el resto del intestino delgado, el colon, recto y ano.
Los signos característicos son en el caso de las altas, vómitos en pozol de café, vómitos con sangre roja rutilante, heces negras o alquitranadas, en el caso de las bajas podría haber heces negras o heces con sangre roja mezclada.
Para tratar una hemorragia digestiva se debe localizar el lugar exacto y su causa para esto nos auxiliamos de un endoscopio flexible, para realizar un procedimiento que llamamos endoscopia o si es en colon colonoscopia.
Úlceras pépticas.
Gástricas.
Pólipos.
Desgarros esofágicos.
Varices en el esófago.
Pólipos colónicos.
Divertículos colónicos.
Cande de esófago.